La Comunidad de Madrid se prepara para luchar contra los incendios este verano

El dispositivo estará operativo en la región hasta el próximo 30 de septiembre. La principal preocupación es la gran cantidad de vegetación por las lluvias de este año

Casi 51 millones de euros dedicará la Comunidad de Madrid al Plan Especial de Protección Civil por Incendios Forestales (INFOMA 2025) que se puso en marcha el pasado 15 de junio y que se presentó este martes 24 en el Parque de Bomberos de Las Rozas. Esta cantidad supone un aumento de la inversión del 8,4% respecto al año pasado, cuando se destinaron 47 millones de euros a luchar contra los incendios en la época más delicada del año.

El operativo que se ha desplegado hasta el próximo 30 de septiembre está formado por un total de 5.970 profesionales, de los que 540 trabajan diariamente en los 22 parques de bomberos, 25 retenes de brigadas forestales, un Grupo Especial de Drones, 19 puestos con bomba forestal pesada, dos puntos de intervención rural con una bomba rural pesada, 38 torres de vigilancia y cuatro cámaras. También participa en la campaña el Equipo de Respuesta Logística Inmediata de Voluntarios de Protección Civil ante Emergencias (ERIVE) con 100 operarios, tres jefes de operación, un vehículo de logística, un furgón, un vehículo de transporte, dos pick-up, dos coches de coordinación y una ambulancia SVB (Soporte Vital Básico).

Junto al ERIVE, la Comunidad de Madrid cuenta con otros profesionales coordinados por la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 (ASEM112). Entre ellos, 1.680 del Cuerpo de Bomberos autonómico, 270 del de Agentes Forestales, 530 Brigadas Forestales, 3.300 voluntarios de Protección Civil repartidos en 113 agrupaciones locales y 180 trabajadores de Madrid 112.

RIESGOS
El consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, ha alertado en la presentación de la campaña del riesgo de incendios forestales para esta época del año, más aún después de los lluviosos meses de primavera, que han provocado un “crecimiento vegetativo explosivo” del pasto, que ahora con el aumento de las temperaturas rápidamente se ha secado y se ha convertido ya en “combustible” para los incendios. “Eso es lo que nos preocupa ahora”, ha reconocido Novillo, que ha valorado positivamente la rápida respuesta de los operativos para actuar contra lo que, por el momento, tan solo han sido “conatos” de incendios en el presente verano.

El año pasado se produjeron 265 siniestros, de los que 204 (un 76,98%) quedaron en conatos, con menos de una hectárea calcinada. Los meses con mayores incidentes fueron junio, julio y agosto, concentrando el 77% de sucesos.

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