Vecinos de Tres Cantos y Colmenar Viejo se unen para denunciar el empeoramiento de la atención sanitaria en la zona

Las asociaciones vecinales de Tres Cantos y Colmenar Viejo han unido sus fuerzas para denunciar el empeoramiento de la atención sanitaria en ambos municipios, que según remarcan se encuentra “en estado de abandono” y presenta “ciertas carencias” que “ponen en riesgo la salud y vidas de los ciudadanos”.

En un comunicado, ambos colectivos han anunciado un acuerdo de colaboración “con la finalidad de recuperar” el estado de la Atención Primaria previo a la pandemia y “recobrar la dignidad” de la sanidad y de los centros de salud, “ya que es vital y de primera necesidad”.

En la actualidad, el Punto de Atención Continuada (PAC) de Tres Cantos es el centro de referencia sanitario de localidades como Colmenar Viejo y municipios de la comarca como Soto del Real pero carece de personal médico, lo que obliga a profesionales a tratar a 125.000 pacientes potenciales, “algo que hace inviable un servicio sanitario de calidad”.

“En ocasiones nos encontramos con que los Centros de Salud de dichas localidades no disponen de médicos en los PAC para prestar atención, sólo personal de Enfermería, que no puede recetar, realizar una valoración y emitir el correspondiente diagnóstico”, ha explicado vicepresidenta de la Asociación Vecinal de Tres Cantos, Esther García.

Según relata, se limitan a enviar al paciente a La Paz, “lo que implica una mayor presión sobre el servicio de urgencias de hospital de referencia, en muchos casos por dolencias menores que colapsan el citado servicio”. “Como sucedió en la pasada Semana Santa, en la que en el Centro de Salud de Tres Cantos no hubo médico prestando asistencia”, ha lamentado.

Desde la Asociación de Vecinos por Colmenar Viejo, su presidente, Daniel Borona, ha incidido en que “la conciencia ciudadana va en aumento ante las carencias que actualmente presentan estos centros de salud” para recalcar en la importancia de la unión para “exigir a las autoridades el restablecimiento de los servicios médicos”. “La salud de los pacientes no se cura con voluntades, se cura con médicos”, ha añadido.

“Hace pocos días se supo que una doctora que prestaba servicio en el PAC de Tres Cantos atendió a 146 pacientes en 24 horas, lo que supone una asistencia por paciente de más de nueve minutos si no hubiera realizado ninguna otra labor más en esas 24 horas, algo que es completamente inasumible”, ha explicado García.

Los vecinos han recordado además que recientemente falleció un vecino de Colmenar Viejo “que no recibió la asistencia sanitaria inmediata que precisaba, ya que en ese momento tampoco existía disponibilidad de una ambulancia, la cual llego 20 minutos después”. “Esta defunción se suma a otras dos que ya ha habido en el mismo municipio por la misma razón”, han recordado.

En este contexto, han hecho un llamamiento “a todas aquellas asociaciones de cualquier índole o condición que deseen sumarse al movimiento” que es “de todos los vecinos”, con el propósito de organizar grupos de trabajo y reuniones que permitan “restaurar un derecho básico que jamás se debería haber perdido: el derecho a la salud”.

CARTA A LA MINISTRA DE SANIDAD

Ambas asociaciones enviaron recientemente una carta a la ministra de Sanidad, Mónica García, en la que le solicitaban una reunión para trasladarle la situación de “desamparo, abandono y desidia” que sufren los habitantes de ambas localidades por el estado de los servicios de atención sanitaria.

“Es una situación insostenible que comenzó con la pandemia provocada por el Covid-19 y que ya dura más de 4 años, empeorando día a día, poniendo en riesgo la salud y vida de los colmenareños y tricantinos. Y que como consecuencia ya se han registrado víctimas mortales por falta de atención sanitaria”, indicaban en el escrito.

En el mismo, ambas asociaciones reclamaban una reunión con la titular del Ministerio de Sanidad “a la mayor brevedad posible” porque, remarcaban, “la vida es urgente”. “La falta de respuesta de los responsables directos de la Comunidad Autónoma nos obliga a buscar soluciones en las autoridades nacionales, y si ahí tampoco nos las dan, habrá que ir a Europa”, alegaban desde la Asociación de Vecinos de Colmenar Viejo.