Nuevo ataque al mural feminista del 8-M en Getafe
Esta es la segunda ocasión en los últimos cuatro años que esta pintura aparece vandalizada


El Sur de Madrid ha sufrido en las últimas semanas varios ataques vandálicos. A principios de mes Parla denunciaba la aparición de esvásticas y símbolos nazis en varios murales urbanos y edificios de la localidad, uno de ellos dedicado a las mujeres y financiado con fondos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Ahora le ha tocado a Getafe.
El objetivo, en este caso, ha sido también el mural feminista del 8-M, ubicado junto a la estación de Cercanías Central, con los rostros de Clara Campoamor, Rigoberta Menchú y Frida Kahlo, entre otras. Sus caras aparecieron pintadas simulando turbantes negros y lo acompañaron de una frase en la que se podía leer: 'Éste es el verdadero patriarcado. El islamismo'.
DENUNCIA
La alcaldesa Sara Hernández ha condenado esta nueva vandalización de esta pintura que ya había sido atacada en 2021 emborronando los rostros con colores negros, amarillos y verdes y con simbología nazi. “Frente al odio, el extremismo y el racismo, la localidad de Getafe siempre se levantará”, ha dicho la primera edil, quien ha incidido en que “no nos callarán en la defensa de la igualdad, la lucha diaria del feminismo y el progreso”.
El suceso ha sido denunciado ante la Policía que ya “investiga a los cobardes que lo han hecho”, ha añadido. En esta línea, fuentes municipales han confirmado que se están visionando las cámaras de la zona para revisar si grabaron a los autores del ataque. Además, cabe destacar que una cuenta de Instagram ha difundido un vídeo que recoge varios momentos en los que se ve como un grupo de jóvenes vandaliza el mural feminista.
Se lo atribuye una organización juvenil que ha dicho en sus redes que: “Toda la basura que pintéis la volveremos a tapar”. La empresa municipal Limpieza y Medio Ambiente (Lyma) de Getafe logró subsanar en apenas unas horas los daños ocasionados en la madrugada del domingo. Según han informado fuentes municipales, los empleados procedieron a la limpieza de la pintura y al borrado de la inscripción islamófoba. Al parecer, este tipo de murales lleva una capa de un material protector para minimizar el impacto de estos actos vandálicos. Pese a ello, esta capa, así como parte de la pintura original del mural, han quedado parcialmente dañadas y habrá que proceder a labores de restauración.