El autor madrileño presenta ‘Está lloviendo y te quiero’, la vida de cuatro generaciones de una familia con la que recorre la historia de España en el siglo XX

Antonio Mercero:
“Es esencial usar el sentido del humor cuando las cosas te van mal”
Un reloj que sale a la venta en Wallapop y el título de un guion que nunca vio la luz. A partir de esos dos elementos, que para una persona normal no guardan ninguna relación, Antonio Mercero ha creado ‘Está lloviendo y te quiero’ (Planeta), una novela con cierto espíritu familiar y que ha escrito “con las tripas”. “Sí, hay escritores que jamás encontrarán la historia que está en sus tripas, jamás, y pueden escribir 25 libros. En cambio, hay escritores que dan enseguida con una historia que tiene que ser contada, pero no es tan fácil”, ahonda el autor.
En ‘Está lloviendo y te quiero’, Mercero sitúa al lector en Lasarte, en 1916, para contar la historia de Ramón Mercero, su tatarabuelo, quien, efectivamente, se dedicaba a fabricar relojes, aunque el autor matiza que “no he querido hacer una autoficción ni una novela autobiográfica, no quería erigirme en el cronista de mi familia, me correrían a gorrazos si yo tuviera esa pretensión”. Aunque esta historia sea “ficción”, el autor sí ha rendido un pequeño homenaje a su padre a través de uno de los personajes que tiene en el cine una de sus grandes pasiones, además de “un lado lúdico de la vida, que creo que era la característica principal de mi padre; usar el sentido del humor cuando las cosas van mal es esencial, te da ventaja sobre el resto del mundo”.
MUCHA MIGA
En esa ambientación, Mercero va haciendo un recorrido por “los años 30 de la República, por supuesto por la Guerra Civil, cuento todos estos episodios desde el punto de vista de una localidad muy pequeñita como es Lasarte, desde donde se miran a todos estos acontecimientos tan bestiales, para meternos también en la posguerra y en la represión franquista, además del comunismo clandestino, de las tertulias en los cineclubs y de las protestas estudiantiales”, todo ello para coser “la historia de una familia a lo largo de cuatro generaciones”, además de la historia de Lasarte, un pueblo que, a juicio del autor, se convierte en “un territorio un poco mágico porque es una aldea de casas diseminadas y, de pronto, en cuestión de dos años, se convierte en un lugar de reunión de reyes y de aristócratas españoles y extranjeros”.
Lejos de lo que pudiera pensarse, el título de la novela no es una declaración de amor. Esa frase, está lloviendo y te quiero, es el mensaje que aparece en el interior de un reloj, un elemento que sirve para que Antonio Mercero reflexione sobre el tiempo: “La metáfora no puede ser más obvia, pero tampoco más insoslayable, hay que hacerla; no es lo mismo el paso del tiempo en 1916 que hoy en día, al igual que no es lo mismo el sentido del futuro o del porvenir actualmente que en la posguerra, cuando no sabías si ibas a tener un plato de comida en la mesa”.
Preguntado sobre el género en el que enmarca esta novela, el autor afirma que “es una saga familiar y, sobre todo, de personajes”, al tiempo que expresa su deseo de “llevarla al cine; la veo muy visual, no sería complicado adaptarla”.
DIFERENCIAS RESPECTO A CARMEN MOLA
“Quería alejarme de Carmen Mola, por lo menos por un rato. De los tres integrantes, soy, sin duda el que más lo ha hecho, ya desde el título”. Así define Antonio Mercero esta experiencia de publicar una novela alejado de un fenómeno literario que vivió desde el anonimato hasta que en 2021 se desveló el misterio con la consecución del Premio Planeta gracias a ‘La bestia’.
Eso sí, salir de ese sello ha supuesto un cambio en la forma de trabajar: “Con Carmen Mola trabajamos con escaletas de cien páginas, todo muy detallado. Escribir solo me ha permitido volver a disfrutar del proceso, aunque también hay más presión: si algo sale mal, la culpa es solo mía”, admite.