La exposición de pintura contemporánea ‘Esperando la primavera’ llega a la capital de la mano de Karen Huber

La exposición Esperando la primavera, con obras de diversos artistas emergentes internacionales de la Galería de Karen Huber, se instala hasta el 15 de marzo (de 12.00 a 15.00 horas y de 18.00 a 21.00 horas) en el centro de Madrid, en concreto en el número dos de la calle Belén, con el objetivo de fortalecer los lazos artísticos entre América Latina y Europa. De esta forma, reafirma el compromiso con la pintura contemporánea y la apuesta por el talento desconocido.

“En un panorama donde las dinámicas del arte se transforman constantemente, buscamos nuevas formas de conectar, exhibir y experimentar la pintura contemporánea”, señala Karen Huber.

Esta muestra reúne las propuestas más innovadoras de artistas de distintas partes del mundo. “Al igual que la estación que le da nombre, este proyecto se erige como un instante concreto, justo antes de la floración, donde lo que aún está latente comienza a manifestarse en toda su intensidad”, traslada Huber.

Los autores de las obras, que exploran el sentido pictórico desde lo más abstracto a lo figurativo, son Andrew Birk (Oregon, 1985), Allan Villavicencio (Ciudad de México, 1987), Othiana Roffiel (Ciudad de México, 1990), Manuel Forte (Porto, 1978), Ian Grose (Johannesburgo, 1985), Yann Leto (Burdeos, 1979), Alejandra Laviada (Ciudad de México, 1980), Los Bravú (Dea Gómez, Salamanca, 1989 y Diego Omil, Pontevedra, 1988) y Daniel Horowitz (Nueva York, 1978).

“La pintura, con su historia profundamente arraigada, sigue tejiendo su evolución, encontrando nuevos significados en el cruce y el intercambio entre distintas escenas culturales”, apunta Huber. Cada uno de estos artistas aporta, a través de su obra, una perspectiva única con una fuerte carga conceptual que abarca diversos enfoques.

Karen Huber explora los límites de la pintura actual apostando por una visión experimental y propositiva. De esta forma, se ha convertido en pionera descubriendo a artistas de pintura contemporánea que posteriormente se han posicionado en lo más alto del panorama internacional llegando a exponer sus pinturas en el MoMA, el PAMM o la Bienal de Venecia.

“Más allá del ritmo vertiginoso de las ferias, esta iniciativa busca generar un espacio de reflexión pausada, un refugio donde las obras y los artistas puedan resonar en su propio tiempo y espacio, invitando al espectador a un encuentro sereno y duradero”, concluye Huber.