Todo comienzo tiene un final, y la carrera musical de Paloma San Basilio no es una excepción. La artista madrileña ha querido, además, que su adiós a los escenarios llegue con una gira en la que celebra sus 50 años en la música. Este tour tan emotivo tiene nada menos que tres fechas en el Universal Music Festival.

¿En qué momento decide que esta gira servirá para despedirse de los escenarios? ¿Viene dado por cumplir una cifra tan redonda como 50 años de carrera?


Creo que ha sido algo que venía gestándose desde dentro. Siempre tuve claro que iba a poner fin a mi recorrido cuando sintiese que era el momento de hacerlo, no me gusta alargar los momentos, ni siquiera cuando estoy en una relación o en una cena con amigos, me gusta que todo tenga su tiempo y que no haya una sensación de que eso ya se tenía que haber terminado. Creo que es un momento buenísimo para cerrar el ciclo, 50 años es una cifra maravillosa y la verdad es que estoy muy bien en el escenario, me siento muy cómoda, muy a gusto, disfruto mucho, quería irme disfrutando y haciendo disfrutar a la gente, también darme la oportunidad de que, a partir de ahora, hay otras cosas que yo quiero hacer. No me gusta agotar los tiempos y, sobre todo, sentir que no tienes nada más que aportar. Creo que lo que he hecho es mucho también, pero hay cosas nuevas que me llaman y que me van a obligar a un ejercicio de aprendizaje, de arriesgar; esta profesión no la entiendo sin riesgo.

A partir de los conciertos que ha ido dando dentro de esta gira de despedida, como los que dio en Latinoamérica a finales de 2024 y comienzos de 2025. ¿Le llega más gratitud si cabe del público ahora sabiendo que está ante sus últimas actuaciones?


En España he hecho mucho teatro musical y hubo un momento en el que dejé de hacer tantas giras. Allí en América he hecho giras con más frecuencia, he sido muy fiel al mercado. La verdad es que allí me quieren muchísimo, pero siento que también tengo un lugar en España muy claro, la propuesta en que hemos abierto los conciertos, muchos están agotando ya, en el Albéniz hemos tenido que abrir más fechas. Todo esto me hace darme cuenta de que aquí hay ganas de verme porque realmente yo soy una cantante de discos, tengo más de 30, pero, como han destacado en algunas ocasiones, mi plato fuerte siempre ha sido el directo, creo que soy una cantante de escenario, de estar haciendo en el momento lo que me late y lo que me fluye y creo que eso la gente lo recuerda. El público que me ha ido a ver una vez suele repetir y, a veces, vienen con sus hijos y con sus parejas y todo eso genera, contamina en el buen sentido de la palabra el gusto por ir a ver a un artista.

Ha comentado que va a hacer un repertorio un poco diferente a lo habitual, que también se ha permitido algunas licencias. ¿Cómo ha sido ese trabajo previo de ver qué incluye y qué deja fuera en esta gira tan especial?

S
iempre he sido muy de cantar lo que me apetece, de hecho mis conciertos se han alimentado de mi música en una porción que te diría es incluso de un tercio, ni siquiera en un 50%. Ahora la elección era hacer música en español con autores importantes, donde por supuesto faltan autores, porque es imposible abarcarlos a todos, pero hay muchos autores importantes a los que yo quería cantarles por primera vez canciones que han sido muy emblemáticas y que me han gustado mucho. Un ejemplo de ello es 'Hijo de la luna'. También hay una incursión en temas más rítmicos de autores más jóvenes que me encantan lo que hacen. Por ejemplo, el tema de Luis Fonsi 'Despacito' me parece una canción preciosa y que realmente descubrí viendo a un artista tocando en el violencello cerca del Templo de Debod. Ahí comprobé que era una melodía muy bonita y me apetecía cantarla. También hay algunas otras que siento la necesidad de cantarlas porque en el fondo me gusta jugar con el escenario, me gusta bailar, me gusta sorprender, me gusta hacer todo desde la convicción de que lo hago porque siento que me apetece hacerlo, no porque tenga que hacerlo. Hay cosas que pueden estar más encajadas dentro de mi registro y otras que no, pero yo creo que como tengo mucho de actriz me viene muy bien para moverme por distintos personajes dependiendo de la canción que interpreto.

Pone fin a su trayectoria musical pero va a seguir adelante con el teatro, también va a publicar un libro. Paloma sigue volando. 

Sí, mientras tenga alas, yo voy a seguir volando y, mientras tenga cosas que contar y cosas que descubrir, voy a seguir adelante. Tenemos la suerte de tener en estos momentos una esperanza de vida importante, en España la media de la longevidad ahora mismo está en los 86 años, así que, cómo te vas a permitir el lujo de estar toda la vida haciendo lo mismo, con la cantidad de cosas que uno tiene por hacer. Aprendía a hacer esquí acuático con más de 40 años, he ido aprendiendo cosas a lo largo de décadas distintas y todavía espero seguir descubriendo mucho.

Ha tenido muchos reconocimientos, muchos premios a lo largo de su trayectoria. En 2021 recibía esa Medalla de Oro a las Bellas Artes por parte de los reyes. ¿Qué supuso para usted?


Fue muy bonito porque realmente tengo muchos premios de diferentes países, tengo Grammys por toda mi carrera, pero cuando tu país, España, te reconoce por una trayectoria creo que también es muy bonito, y más de mano de los reyes, que son unas personas que hacen una labor encomiable y a quienes realmente tenemos que agradecer todo lo que hacen. Realmente fue muy emocionante. Todas mis cosas no están en casa repartidas por diferentes lugares, no me gusta estar repitiéndome a mí misma, pero por ejemplo esa medalla la tengo en un sitio muy especial, igual que el Grammy.