Los miles de kilómetros que separan geográficamente a México de España encuentran, a nivel cultural, un puente doble que acorta de forma notable las distancias. Al uso del castellano se suma un lenguaje, el musical, que permiten a bandas y artistas tener eco a ambos lados del Atlántico. Un buen ejemplo de ello es Enjambre. El grupo mexicano atraviesa un momento dulce plasmado en un tour que arrancó en 2023 y que incluye triple parada en España. Hablamos con su vocalista, Luis Humberto Navejas.

Enjambre va a tener aquí en España tres actuaciones diferentes este mes de septiembre. ¿Qué sensaciones tenéis? ¿Cómo afrontáis esta vuelta a España?
Estoy emocionado, al igual que el resto de la banda. Las pocas veces que hemos ido a España han sido experiencias muy gratas, son personas muy lindas, siempre muy atentas con nosotros tanto como músicos como mexicanos en general, siempre nos sentimos muy bien recibidos. Ya hemos visitado con anterioridad los lugares donde iremos y nos hemos llevado experiencias muy gratas. El poder ir y presentar nuestra música a estos lugares es muy emocionante y tenemos más que nada curiosidad de ver qué tan interesados están las personas de por allá en nuestra música y, si no, ver qué les parece, si pueden identificarse o sonorizar algunos momentos de sus vidas.

Lleváis este 2024 y parte de 2023 de gira. Ha sido calificado ya como el tour más exitoso de vuestra carrera. No sé si estás de acuerdo con esa definición.
Sí, estoy de acuerdo. Ha sido la gira con más número de fechas en menos lapso de tiempo y en lugares más grandes, hemos tenido convocatorias mayores en este último par de años más que nunca, lo cual nos alegra porque ya estamos ahorita en nuestro octavo disco, es muy gratificante ver cómo cada vez más y más personas están descubriendo Enjambre y están escuchándonos y son gente de diferentes generaciones, de diferentes edades. Es muy extraño estar tocando y de repente ver en el público chavitos o jovencitos, esto no lo esperábamos, es muy guay, como dirían ustedes.

Vuestro último disco, ‘Noches de salón’, os ha permitido revisitar canciones desde otros estilos, buscarles nuevas vidas. ¿Cómo ha sido el proceso de trabajo para buscar nuevos prismas a temas como ‘Maníaca cardíaca’?
Nuevas vidas es un término muy acertado porque habíamos sido renuentes a sacar nuestro disco desenchufado por muchos años, es algo que queríamos hacer pero siempre preferíamos hacer música nueva en lugar de revisitar canciones que ya existen. Sin embargo, a la hora de hacerlo en estos ritmos, en estos géneros, fue como hacer la canción de cero, empezar desde el principio, entonces son prácticamente nuevas canciones, tienen una vida nueva. Si vamos a hacer un concierto desenchufado, teníamos que buscar como una buena razón para hacerlo y esa buena razón se encontró justamente en este universo del salón, con todos estos ritmos antiguos como el mambo, el bolero, el bolero ranchero, las rancheras... toda esta música que ha sido parte del ADN de Enjambre desde un principio. Nada más los desvestimos de rock and roll, quitamos lo eléctrico, las guitarras eléctricas, el bajo eléctrico, la batería, los sintetizadores, y lo que quedó ahí fue lo que utilizamos como el núcleo de lo que iba a terminar convirtiéndose en la canción, ahora vestida con otros arreglos instrumentos como el contrabajo, el piano de tecla pesada, las percusiones, cuerdas... Fue un experimento que nos ha dado muchas satisfacciones desde el momento que ya las canciones empezaron a existir, sonando en estos estilos y en estos géneros hasta ya poderlo compartir con un público y que haya sido tan bien recibido.

El hecho de haber apostado por esos géneros, ¿notáis que también os ha abierto las puertas a nuevos públicos?
Definitivamente. Noté un par de detalles, la gente mayor, que posiblemente con sus hijos o sus sobrinos o sus hermanos menores escuchaban Enjambre, son un público nuevo que adquirimos gracias a ‘Noches de salón’. Una opinión recurrente es “ay, ahora entiendo lo que dice la letra”, luego, con todas las guitarras distorsionadas o estos sintetizadores o músicas o baterías muy subidas de volumen, a veces no se distinguía de lo que se hablaban las canciones. Más gente no tan afín al ruido ha empezado a descubrir las melodías y las líricas, que son cosas con las que tal vez se pueden identificar también. A la hora de hacer ‘Noches de salón’, toda la melodía y la lírica quedó más expuesta. La otra sorpresa fue la gente más joven. Por alguna extraña razón he sentido que son más atraídos hacia Enjambre después de escuchar las canciones de ‘Noches de salón’. Me he preguntado ¿por qué siendo música que suena algo más antiguo está atrayendo a gente más nueva? Creo que la lógica que encontré detrás de eso fue que esa música, estos ritmos que estamos mencionando, en algún momento fue la música de jóvenes, en algún momento causó algún tipo de sentimiento festivo, melancólico y conectó con jóvenes de otras generaciones; tiene ese sentimiento y esa esencia que tal vez sentían nuestros padres, nuestros abuelos al escuchar esta música de salón.

He leído que estáis preparando también nuevo material. ¿Cómo de difícil es centrarse y pensar en nuevas canciones en medio de la vorágine de una gira tan extensa y tan importante como esta?
A mí me ayuda más estar activo para poder escribir, porque lo que compongo siempre es un reflejo, es la consecuencia de lo que estoy viviendo día a día, moverme y vivir experiencias nuevas, diferentes, son las que me dan los ingredientes para la nueva música, para dejar de cantar siempre sobre lo mismo. La vida me da experiencias nuevas, eso influye mucho a lo que escribo, a veces el viajar, conocer cosas nuevas, conocer lugares nuevos, gente nueva, me afecta y me da más sustancia para poder seguir componiendo.

Mirando a vuestros trabajos anteriores, se puede decir que seguís una fórmula que es rock anglosajón y letras latinas. ¿Es más difícil apostar por esto hoy en día donde parece que el género urbano lo inunda todo?
A nosotros nos tiene sin cuidado qué es lo que está de moda o qué es lo que está inundando. Nuestro interés nunca ha sido ser populares, incluso no sabíamos que íbamos a poder vivir de esto, siempre ha sido una cosa que hemos hecho para expresarnos, ha sido una expresión artística de lo que hacemos y eso es lo que sigue siendo. Siempre la música que está más de moda es la música más carente de sustancia, no es algo que yo consumo o que me interese y no es algo con lo que estoy compitiendo tampoco, es como jugar dos deportes diferentes, francamente. El gusto se rompe en géneros y hay música para todas las personas, y si a alguien le gusta el urbano, está bien que escuche eso; si a alguien le gusta el rock contemporáneo que lo escuche, hay muchas orejas para todo.

A pesar de ello mirando en Spotify tenéis dos canciones que superan los 100 millones de reproducciones, ‘Dulce soledad’ y ‘Visita’. ¿Reconfortan esas cifras o es algo de lo que no estáis demasiado pendientes?
Últimamente he estado escuchándolo, es así, pero no es algo que yo conocía con esa precisión. Es un dato bastante agradable porque sí, a pesar de que la razón por la cual hacemos música es para poder expresarnos, lo presentamos siempre desde un escenario, desde las grabaciones y sí nos interesa bastante que a la gente le guste. Ya si no les gusta o no, no importa, nosotros cumplimos con hacer lo que queríamos escuchar, que queríamos interpretar. Escuchar estos números es una cosa que nos trae muchísima alegría y satisfacción.

Esas dos canciones pertenecen al mismo álbum, ‘Daltónico’, ¿consideráis que es vuestro disco más redondo o personalmente os quedáis con otro?
Personalmente me quedo con otro, pero sí es nuestro disco más redondo. Entiendo por qué es el disco con el que más personas nos conocen, es el que nos puso en el mapa, en vivo tocamos un buen número de temas de ese álbum, así que entiendo que es nuestro disco más redondo. Y no me molesta, es un disco que nos representa muy bien, cada disco que hacemos creo que son discos que nos representan muy bien, con excepción del primero, del segundo en adelante, cualquiera, es un buen embajador de lo que es Enjambre. ‘Daltónico’ nos ha traído muchas satisfacciones y lo sigue haciendo.

Volviendo al presente y a esas fechas que tenéis en España, en dos de ellas vais a estar acompañados por otro artista mexicano, Siddhartha. Si pudierais compartir escenario con algún grupo o artista español, ¿quién sería?
Lori Meyers.

¿Y algún otro con el que sintáis especial afinidad musical?
Hombres G. Una vez estuve en España y vi que hay como un movimiento anti Hombres G, no entiendo por qué. De chico escuchaba todos sus discos, me acompañaron en momentos muy alegres de mi vida, soy súper fan de David Summers, es uno de los mejores compositores que existen, tiene una voz muy peculiar, además de que toca el bajo mientras canta, que no es una cosa muy común. Es uno de mis héroes de la composición y el grupo tiene unos temazos que hasta el día de hoy sigo disfrutando con singular alegría.